418. TAN SOLO UNA LUZ
Tan sólo una luz puede encender un
fuego, y pronto su calor, abarcar al
mundo entero. Así es como el Amor
de Dios cuando habita en ti, a los
demás lo llevarás nada te detendrá.
Has visto el verdor de la naturaleza,
y el tenue resplandor del sol cuando
se aleja. Más bello es el Amor de
Dios cuando en tu alma está, tú
corazón se llenará de luz y
resplandor.
Quisiera para ti la paz que Dios me
ha dado, en El puedes confiar no
importa tu pasado. Al mundo lo
anunciaré, todos han de saber que el
Dios de Amor a mí llegó, mi vida
transformó